¿Qué esperas para empezar?

Quizás llegó el momento, después de haber pensado y reflexionado en el asunto de cual seria la mejor opción para vos y tal vez has decidido luchar contra la enfermedad del sobrepeso o solo de esos  kilos por demás y deseas recuperar tu estado físico, lograr el bienestar y con él tu auto estima. Quizás el recuerdo de fracasos pasados te inhiba, te cree incertidumbre y te preguntes: ¿por qué esta vez sería diferente a las anteriores?

Todos enviamos mensajes al cerebro que nos llevan a actuar de una determinada manera, si repetimos una y otra vez que no se va a poder hacer algo es probable que nunca se lleve a la práctica. Por el contrario, si el mensaje es positivo, hay buenas posibilidades de que lo consigamos. Generalmente, se puede hacer mucho más de lo que creemos. Por esta causa, el “no puedo” con frecuencia quiere decir “no quiero” o “no estoy dispuesto a hacer el esfuerzo por lograrlo”. Es importante reflexionar sobre cómo se dan estas características en uno mismo ya que la meta propuesta requiere transformar el “no puedo” por “voy a lograrlo”. Piensa cuántas veces te dijiste que no ibas a poder dejar de comer determinado tipo de alimento o en determinadas circunstancias. La lista de los “no puedo” se transforma en estímulos que te llevan a comer. Es importante emprender un autoconocimiento de las propias conductas y reconocerlas. Y en lugar de comer frente a determinados estímulos como la culpa, el enojo, el aburrimiento, la frustración debemos ahondar en ellos y sanarlos, ya que serán los detonantes a sacarte de tu eje y quitarte del camino. 

Muchas veces el ser humano responde a un estímulo comiendo, no dándose cuenta del daño que esto le ocasiona a la salud y en su defecto al cuerpo. Cuando uno comienza a cambiar los hábitos insanos por hábitos sanos, indefectiblemente  adelgaza.

Es esencial aprender a decir “no” frente a cierto tipo de alimentos por un tiempo como a reemplazar la satisfacción de comer por otros placeres más constructivos. Será una auténtica búsqueda de gratificaciones.

Para poder ir avanzando en este camino, será necesario transformar los problemas en soluciones, para esto hay 3 pasos fundamentales:

-Preguntarse “cómo” en lugar de “por qué”. Este último paraliza, el primero ayuda a encontrar la solución.

-¿Que tal si comenzás a armonizarte y equilibrarte internamente ?. Verás como todo cambia. Es un excelente comienzo.

-Comienza con tu crecimiento espiritual y deshazte de todos los bloqueos mentales y trabas, luego puedes ir poniendo metas lógicas. Los grandes problemas se resuelven dando pequeños pasos pero IMPORTANTES. Si busca desde el comienzo encontrar la solución a todos los problemas o bajar todos los kilos inmediatamente, es probable que abandone su intento si ve que las dificultades se mantienen o que el peso desciende muy lentamente.

– Valore sus avances en lugar de lamentar sus errores. Nada más perjudicial que un sentimiento negativo en el que constantemente se remarquen los errores sin valorar los logros. Recuerde que es muy difícil la perfección desde el principio. No se pregunte ¿“Por qué fallé”? sino ¿ “Cómo puedo mejorar”? Haga una introspección e identifique que sentimientos, sensaciones o pensamientos vienen a usted en forma recurrente. Será momento de empezar a trabajar en ellos.

-Propóngase sus objetivos SOLO POR HOY. Toma una hoja y anota estas preguntas.

Empieza por el test de las 5 preguntas de autoevaluación.

AUTOEVALUACIÓN

1-¿Qué circunstancia o hecho hace que no pueda comenzar con el plan de alimentación y ejercicios? ¿Por qué?

2-¿En verdad quiero hacer este cambio ?

3-¿Estoy dispuesto/a  reconocer y sanar los sentimientos que se esconden detrás de todo esto?

4-¿Qué tipo de afirmaciones suelo utilizar? ¿Me identifico con los problemas o con las soluciones?

5-¿Estoy dispuesta/o a salir de mi papel de víctima y dejar de lamentarme para empezar a tomar el control de mi cuerpo y de mi vida y de todo lo que me sucede?

Puedes empezar hoy mismo si te lo propones